domingo, 28 de septiembre de 2008

29 de Septiembre: Nacimiento de Miguel de Cervantes









Nació en 1547 en Alcalá de Henares pero la fecha exacta no está clara. Generalmente se la sitúa entre el 29 de septiembre y el 9 de octubre, cuando fue bautizado.

Su padre, Rodrigo, provenía de una familia próspera que había quedado en la pobreza, mientras que su madre, Leonor de Cortinas, era hija de un magistrado que llegó a poseer una muy pequeña propiedad en Castilla y que tampoco conoció la prosperidad.

Esto marcó la infancia del autor del Quijote, ya que su padre -que era cirujano de profesión- peregrinó por las ciudades más populares de España en ese entonces, buscando salir de la pobreza, algo que no consiguió nunca.

Su padre, sin embargo, siempre se preocupó porque sus hijos pudieran educarse. Sus dos hermanas sabían leer y Cervantes mismo demostró ser un lector precoz.

En 1555, viviendo en Córdoba, ingresó a un colegio jesuita, pero en 1556 su familia tuvo que trasladarse a Sevilla, que era la ciudad más importante de Europa después de París y Nápoles.

Su educación continuó de la mano de los jesuitas y ya adolescente, Miguel de Cervantes se distraía viendo las representaciones de Lope de Rueda, un popular autor español por el cual mostró gran admiración.

Siempre huyendo de la pobreza y las deudas, por las que el padre ya había sido encarcelado en ocasiones anteriores, la familia Cervantes se trasladó a Madrid en 1566, que años antes se había convertido en la nueva capital del Imperio Español. Es allí donde escribe sus primeros sonetos en honor de Isabel de Valois, quien fuera esposa de Felipe II.

En 1569, Cervantes se vio obligado a dejar España, aparentemente huyendo de la justicia, y se trasladó a los dominios españoles en Italia.

Las armas

Es allí donde decidió abrazar la carrera militar y se alistó como soldado en la compañía de Diego de Urbina.

Al servicio de esta compañía, se unió a la armada formada por España, Venecia y el Vaticano para enfrentar al Imperio Otomano, dominante en el Mediterráneo.

En 1571, esta fuerza combinada derrotó a la armada turca en Lepanto, donde el autor terminó con heridas que terminaron inutilizando su mano izquierda. A raíz de esto, Cervantes pasará a ser conocido como "el manco de Lepanto".

La carrera de Cervantes no concluyó allí, ya que continuó al servicio de las fuerzas españolas hasta 1575. Ese año, el autor del Quijote -con la intención de mejorar su posición dentro de la milicia- decidió regresar a España.

Sin embargo, el infortunio volvió a golpear a Cervantes ya que la nave en que viajaba fue abordada por piratas. Esto le significó cinco años de cautiverio en Argel, en el norte de África.

En 1580 fue liberado y regresó a España. Pero su carrera militar estaba arruinada y Cervantes, que siempre buscó salir de la pobreza, decidió probar su suerte en las letras, por las que había mostrado su inclinación desde niño. Antes intentó obtener un puesto en América, pero no lo logró.

Las letras

Cervantes publicó en 1584 "Los tratos de Argel" y "Numancia" y ese mismo año, se casó con Catalina de Salazar y Palacios, cuya familia provenía de Esquivías, un pueblo campesino en La Mancha.

En 1585, Miguel de Cervantes publicó su primera obra de importancia: la novela pastoril "La Galatea". Sin embargo, el buen recibimiento de la obra no le ayudó a superar sus penurias económicas.

No obstante, el autor no se dio por vencido y continuó escribiendo. En 1587, logró ingresar a un importante círculo literario en Madrid, la Academia Imitatoria.

Su necesidad de dinero hizo que aceptara la posición de comisario real de abastos (recaudador de especies). Tampoco le fue bien en este oficio, ya que su celo recaudatorio lo enfrentó a la Iglesia que lo excomulga.

En 1594, mientras ejercía el oficio de recaudador de impuestos, el banquero a quien entregaba las importantes sumas de las recaudaciones terminó quebrando, Cervantes fue encarcelado.

En 1603 dejó Madrid y se trasladó a Valladolid, pero poco después regresó a la capital española. Su celo literario, mientras tanto, no lo abandonó y en 1605 apareció en Madrid la primera parte de "El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La Mancha".

La obra probó ser un éxito y Cervantes continuó publicando trabajos, entre los que destacan sus "Novelas ejemplares" (1613), "Viaje al Parmaso" (1614) y "Comedias y entremeses" (1615).

No obstante, el autor nunca logró una posición económica holgada y sólo en 1615, cuando publicó la segunda parte de "El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La Mancha", logró aliviar en algo sus penurias.

Un año después, en Madrid, Miguel de Cervantes Saavedra veía acabada su vida y era enterrado en el convento de las Trinitarias Descalzas.

Unos meses antes de su muerte, uno de sus censores le envió una conversación con unos caballeros del séquito del embajador francés y uno de ellos decía:

"Si necesidad le ha de obligar a escribir, pluga a Dios que nunca tenga abundancia, para que con sus obras, siendo él pobre, haga rico a todo el mundo".


@@@@@@@@@@@@@@@@@@@@@@@


29 de Septiembre nacimiento de Miguel de Unamuno

Nace en Bilbao el 29 de Septiembre de 1864. Es el tercer hijo y primer varón, tras María Felisa y María Jesusa, del matrimonio de Don Félix de Unamuno, comerciante, con su sobrina carnal. Más tarde nacerán Felix, Susana y María Mercedes.

Su infancia fue como la de cualquier niño de la época, cursando sus primeros estudios en el colegio San Nicolás, instalado en la buhardilla de un viejo caserón. Miguel tenía fama de serio y callado entre los maestros del colegio.

A los seis años de edad muere su padre y Miguel queda a cargo de su abuela, Benita Unamuno, de quien nos dirá que recibió el coraje de la vida civil, y de su madre, de quien recibió su religiosidad. Su hermana María Jesusa había muerto en 1867 y María Mercedes, que nace en 1868, muere el año siguiente. Su casa es un hogar de mujeres, que de una manera u otra influyen en su comportamiento.

A los nueve años celebró la primera comunión. La celebró en la parroquia de los Santos Juanes. Entre los componentes del grupo de catequesis estaba una chica llamada Concha Lizárraga, la que más tarde sería su mujer. El catequista era Don Isidoro. Miguel seguramente no pensó que años más tarde estaría ante el altar, recibiendo el sacramento del matrimonio con una de sus compañeras, Concha.

TEMA PRINCIPAL DE SUS OBRAS

Unamuno es monotemático, es decir, escribe sobre un sólo tema, en general, su vida y en ella, la búsqueda encarnizada de la fe en la inmortalidad. El mismo lo declaró en 1916: “desde que empecé a escribir he venido desarrollando unos pocos y mismos pensamientos cardinales”. Le obsesionó una cosa: “qué ha de ser de mi conciencia, de las del otro y de la de todos después de que cada uno de nosotros se muera”.

Todo ello se resume en que le interesa de manera específica la pervivencia de la conciencia. Para ello utiliza la razón. De esta agonía entre razón y sentimiento brota “El sentimiento trágico de la vida”.

CRÓNICAS

Crónicas de sus viajes:

  • “Por tierras de Portugal y España” (1911)

  • “Andanzas y visiones españolas” (1922), en los que interpreta sus paisajes dejándose llevar por sus sentimientos.

POESIA

Los temas de su poesía más frecuentes son el amor, la familia, la realidad española, el paisaje, el hombre, la política, Dios y el sentimiento religioso, la soledad del hombre, la vida como sueño o niebla.

  • “Poesía” (1907)

  • “Rosario de Sonetos Líricos”

  • “El Cristo de Velázquez” (1920)

  • “Teresa” (1923)

  • “Romancero del destierro” (1928)

  • “Cancionero”

ENSAYO

Giraron siempre sobre dos temas: la preocupación por España y el sentido de la vida humana.

  • “En torno al casticismo” (1902) donde expone su teoría sobre la intrahistoria: la vida silenciosa de millones de hombres sin historia que cada día hacen su silenciosa labor cotidiana y eterna. Unamuno vio en la vida de estas personas anónimas y humildes la sustancia del progreso, la verdadera tradición de los pueblos.

  • “Del sentimiento trágico de la vida” (1913) que responde a sus preocupaciones existenciales y religiosas.

  • “La agonía del cristianismo”(1925)

  • “Vida de Don Quijote y Sancho” sobre nuestra cultura.

- “Cómo se hace una novela”

NOVELA (a la que llamó nivola)

Su obra novelesca es autobiográfica. Para Unamuno los protagonistas de las novelas son antagonistas del autor, sus “otros-yo”. En ella hay una sobrecarga de idealización, ya que busca desvelar el secreto profundo de la personalidad humana. Tiende también a ahorrar elementos decorativos, buscaba inquietar a sus lectores.

  • “Paz en la guerra” (1897)

  • “Amor y pedagogía” (1902)

  • “Niebla” (1914)

  • “Abel Sánchez”

  • “ La Tía Tula” (1933)

  • “San Manuel Bueno, Mártir” (1933)

TEATRO

A igual que en la novela, olvida toda exigencia escénica, por lo que la densidad de sus ideas no va acompañada de la necesaria fluidez escénica.

  • “Fedra”

  • “Soledad”

  • “El hermano Juan”

  • “El mundo es teatro”

  • “El otro”

  • “Raquel encadenada”

  • “Sombras de ensueño”

SUS OBRAS FILOSÓFICAS

Su filosofía, que no era sistemática, sino más bien una negación de cualquier sistema y una afirmación de “fe en la fe misma”, impregna toda su producción. Formado intelectualmente en el racionalismo y -->[Author:PB]en el positivismo, durante su juventud simpatizó con el socialismo, escribiendo varios artículos para el periódico El Socialista, donde mostraba su preocupación por la situación de España. Es, en un primer momento, favorable a su europeización, aunque posteriormente adoptaría una postura más nacionalista.

Esta preocupación por España (que reflejó en su frase “¡Me duele España!”) se manifiesta en sus ensayos recogidos en sus libros En torno al casticismo (1895), Vida de Don Quijote y Sancho (1905), donde hace del libro cervantino la expresión máxima de la escuela española y permanente modelo de idealismo, y Por tierras de Portugal y España (1911). También son frecuentes los poemas dedicados a exaltar las tierras de Castilla, considerada la médula de España.

Más tarde, la influencia de filósofos como Arthur Schopenhauer, Adolf von Harnack o Sören Aabye Kierkegaard, entre otros, y una crisis personal (cuando contaba 33 años, la enfermedad y posterior muerte de su hijo) contribuyeron a que rechazara el racionalismo, al que contrapuso la necesidad de una creencia voluntarista de Dios y la consideración del carácter existencial de los hechos. Sus meditaciones (desde una óptica vitalista que anticipa el existencialismo 3) sobre el sentido de la vida humana, en el que juegan un papel fundamental la idea de la inmortalidad (que daría sentido a la existencia humana) y de un dios (que debe ser el sostén del hombre), son un enfrentamiento entre su razón, que le lleva al escepticismo, y su corazón, que necesita desesperadamente de Dios. Aunque sus dos grandes obras sobre estos temas son “Del sentimiento trágico de la vida” (1913) y “La agonía del cristianismo” (1925), toda su producción literaria está impregnada de esas preocupaciones.

No hay comentarios: